Historia de la Biblia
CURSO 6. HISTORIA DE LA BIBLIA INTRODUCCIÓN Sécase la hierba, marchítase la flor; más la palabra del Dios nuestro permanece para siempre. Isaías 40.8 Hay eternidad en la Palabra que proviene de Dios. Y, cuando decimos: “Palabra que proviene de Dios” nos estamos refiriendo a toda palabra hablada o escrita que Dios nos haya hecho llegar. Esta afirmación tiene sentido cuando. Si Dios es eterno (1 Timoteo 1.17) todas sus manifestaciones deben serlo también, pero, añadido eso, estas manifestaciones también deben ser perfectas como el Dios que las ha originado es perfecto (Mateo 5.48) por lo que, cualquier Palabra de Dios trasciende al tiempo y no requiere ni necesitará jamás ningún tipo de añadidura o corrección. Así que, es lógico afirmar que, la Palabra del Dios eterno permanece para siempre y, podemos asegurar que, absolutamente nada que, el mundo produzca podrá tener el mismo nivel de autoridad de la Palabra de Dios. No hay sueño, idea, pensamientos, intención, libro, enciclo...